Estoy que me salgo

09 marzo, 2006 ·


Esta mañana me he levantado un poco más cansado de la cuenta. No es que cuando diariamente suena el despertador cerca de las 6 de la mañana uno esté para tirar cohetes, más que nada porque no son horas, pero hoy menos todavía.

No me dolía nada, ni tenía agujetas, ni cansancio muscular. Sólo era sueño, seguramente por acostarme más tarde de lo acostumbrado por escuchar el partido de Champions en la radio.
Para más INRI hoy tenía programada mi primera sesión de entrenamiento interválico -jo, como suena- y el cuerpo no estaba mucho por la labor, por lo menos de buena mañana.

La intranquilidad de lo desconocido me ha tenido todo el día un poco nervioso y dudando de si sería capaz de cumplir con la misión encomendada por mi Maestro Jedi Alfons.

Como introducción a este tipo de entrenamiento, me había prescrito la siguiente sesión:
  • 2000 metros de calentamiento.
  • 2000 metros a tope.
  • 2000 metros de recuperación.
  • 2000 metros a tope.
  • 2000 metros de enfriamiento

Seguro que a un corredor más experimentado esto le parecerá fácil y suave, pero es que estamos hablando de mí, Santi el Piltrafilla, si, ese que tenía como máxima “correr es de cobardes”, el mismo que empezó a correr hace sólo 32 días, por lo que la intranquilidad creo que estaba más que justificada.

Tras volver del trabajo y comer sigo teniendo más sueño todavía así que, como mis obligaciones de padre están cubiertas esta tarde, decido echar una cabezadita y luego ya saldré a correr.

Anque tengo sueño y el ambiente es más que apropiado, no consigo dormirme. No hago más que darle vueltas a la cabeza – en sentido figurado, no como la niña del Exorcista- con la leche de las series, así que me incorporo, me disfrazo de corredor y me voy a acabar con la faena cuanto antes mejor.

Ya tenía decidido ir al Paseo Marítimo de Badalona, así que llego, pongo a cero toda la electrónica que llevo encima y empiezo los 2K de calentamiento. Siempre me pasa igual, los primeros 300 metros de calentamiento me encuentro fatal, sin ritmo, como si mi cuerpo se rebelara y no quisiera correr. Suerte que, poco a poco, la cosa mejora y voy encontrando el ritmillo.

Lo bueno se acaba, así que llego al momento donde se supone tengo que apretar y lo hago lo mejor que puedo. Intento llevar un ritmo constante y lo más fuerte posible, pero teniendo en cuenta que debo llegar al final de la serie fuerte. “No vale fundirse los primeros 100 metros y luego andar”, me dijo mi Maestro.

Intento relajar los hombros y llevar una zancada larga y parece que lo consigo. Miro el GPS por primera vez y ya llevo 600 metros, “ya falta menos”. A lo lejos veo otro runner y parece que lo estoy pillando. Me niego a ponerme como meta adelantarlo. Esto va de hacer series. Las carreras otro día.

Cuando llevo 1200 metros lo adelanto a toda pastilla. Espero que no se pique, que no es mi intención, es que mi Maestro me lo ha mandado.

Poco a poco me olvido de él. Bastante tengo con bufar e intentar regularme, hasta que, finalmente, llego al final de la serie.

Ha sido dura, estoy fundido, pero no me paro y sigo corriendo en “trote cochinero”. Miro el cronómetro y alucino pepinillos: 9’09”. Un rápido cálculo mental y llego a la conclusión de que he hecho 2K a un paso de 4’35” por km.

Estoy eufórico pero enseguida me doy cuenta que todavía me faltan 6K por correr y 2K de ellos serán otra serie igual de infernal.

Aprovecho la recuperación para lo que se supone que está y casi sin darme cuenta ya estoy otra vez en el principio de la segunda serie.

Vuelvo a acelerar y esta vez parece que la serie no se me está haciendo tan larga. A lo lejos vuelvo a ver al mismo runner de antes que se ha dado la vuelta. Otra vez lo voy a adelantar. Se va a creer que todo el rato voy corriendo a este ritmo y no puedo evitar una sonrisilla hasta que mi Pepito Grillo particular me grita “a ver si estamos a lo que estamos”. “Sórdenes” respondo y cuido un poco más la técnica de la zancada que se estaba desmadrando.

Este paseo marítimo va paralelo a la vía del primer ferrocarril de España, Barcelona-Mataró, y yo por hacerle los honores llego al final de la serie bufando como una locomotora a vapor.
Miro el tiempo y 9’04”. Un poco más y clavo los tiempos de las dos series.

Ya sólo me faltan 2K a ritmo de “tranquisqueporhoyyahemoscumplido” hasta llegar al coche, donde me bebo un Isostar como un campeón, hago mis estiramientos y para casa.

Teniendo en cuenta mi bagaje como runner, estoy más que satisfecho con el entrenamiento de hoy.

Cuando se entere mi Maestro, seguro que me propone para Padawan.

6 comentarios:

Anónimo dijo...
12:14 p. m.  

Buen tute que te has pegado. Que envidia.

Yo también corro por el paseo marítimo, pero un poco mas al Sur que tu, en Benalmádena.

Estoy a ver si rompo el letargo en el que me encuentro en estos días y empiezo yo también a darle.

Leyéndote igual me animo también a coger la bicicleta un poco. Tengo un amigo que va hacer los 101 Kms en bici e igual salgo algún día con el por los montes de aquí.

Saludos

kebasha dijo...
12:34 p. m.  

Pues vigila, que los BTTeros estamos un poco locos y esto también se contagia. Te lo digo por experiencia.
Bonito el Arroyo de la Miel. Hace unos años pasé unas vacaciones ahí y es precioso.
Este verano es muy probable que pase unos dias en Torrox con la familia.
Me encanta Málaga y lo de los 101 de Ronda está en la agenda subrayado en rojo, así que un año de estos...
Un saludo.

J. G. dijo...
10:27 p. m.  

Tengo una duda, esa tabla de ese entrenamiento divido en tandas o series de 2.000 metros, para los que no tenemos cuenta kilómetros o cuenta metros :-) ¿Cómo los pasarías a tiempos? Es decir, que ha gustado mucho esa sesión donde se corren si he contado bien, diez kilómetros. Pues me gustaría saberlo como orientación el hacerlo en tiempos.

Gracias.

kebasha dijo...
9:05 a. m.  

JESUS:
¡¡En buen sitio has ido a poner la era!!
¿¿A mi me preguntas de series y entrenamientos??.
Soy el rey de los Piltrafillas y estas cosas me las lleva mi Maestro.
Este entrenamiento, a mi corto entender, no es ni chicha ni limoná, porque tiene una parte de series, pero luego tiene mucha tirada entre series, pero creo que para empezar a hacer algo diferente de lo que hacía hasta ahora que era correr a ritmo contínuo 45'-60', está bien.
La traducción a tiempos dependerá de tus ritmos de carrera.
Yo te comento los tiempos que hice:
* Calentamiento: 12 minutos
* Primera serie: 9 minutos
* Recuperación: 14 minutos
* Segunda serie: 9 minutos
* Enfriamiento: 14 minutos
Total: unos 55 minutos.
Lo que yo he leído por ahí son series donde la recuperación entre ellas se mide en tiempo y no en distancia, pero ya te comento que estoy bastante verde en este asunto.
Un saludo

J. G. dijo...
6:34 p. m.  

Gracias, pero me orienta.

Más zoquete soy yo..

Anónimo dijo...
9:21 p. m.  

Por si sirve de ayuda, las que yo he estado haciendo (hasta 5 x 2000 como máximo) se hacen descansando totalmente 3 minutos entre serie y serie, las series se hacen en R3, sin reservarse pero calculando que van a ser unas cuantas y hay que hacer tiempos parejas.

SP, o sea tú no yo, te veo cada vez más metido, estás perdido ;-)